Mientras la economía de Venezuela se desplomaba en 2017, la petrolera estatal del país contrató al ex congresista de Miami Daniel Rivera para una costosa campaña de relaciones públicas con el fin de mejorar la empañada imagen de la firma venezolana en Estados Unidos. En pocos meses, el negocio de consultoría de Rivera recaudó 20 millones de dólares de la filial estadounidense de Venezuela, PDV USA, pero su contrato con el ex político terminó abruptamente cuando fue acusado de hacer poco trabajo, según una demanda. Documentos judiciales recién presentados revelan que Rivera desvió más de la mitad de sus ingresos de PDV USA -13 millones de dólares- a tres subcontratistas en Miami que supuestamente prestaban «servicios de consultoría estratégica internacional» para la empresa venezolana. Uno de los subcontratistas de Rivera que recibió millones de su acuerdo con Venezuela es un promotor inmobiliario que fue condenado en uno de los mayores casos de narcotráfico del sur de Florida, según han podido saber el Miami Herald y el Nuevo Herald por los registros judiciales. No está claro en los registros si el promotor de Miami Hugo Perera y los otros receptores de los pagos de Rivera alguna vez hicieron algún trabajo como parte del contrato de su firma consultora con PDV USA.
La filial estadounidense de Venezuela sólo se enteró del desvío de pagos de Rivera después de que demandara a su empresa, Interamerican Consulting, en 2020; ahora está luchando con Rivera y los abogados de su firma para obtener pruebas clave del ex político. PDV USA, con sede en Nueva York, busca recuperar los 20 millones de dólares en pagos de la empresa de Rivera en una demanda por incumplimiento de contrato derivada de su acuerdo original de 50 millones de dólares firmado en 2017. La empresa de Rivera ha presentado una contrademanda que busca el pago completo del contrato. Rivera, que nunca se registró como agente extranjero ante el gobierno de Estados Unidos para hacer trabajos de consultoría para la firma venezolana, ha estado bajo escrutinio en una investigación criminal paralela por parte de los fiscales federales en Miami, según varias fuentes familiarizadas con la investigación. Pero nadie, incluido Rivera, ha sido acusado en relación con su contrato con PDV USA.
Los registros judiciales del caso PDV USA, presentados en un tribunal federal de Nueva York, muestran que Rivera desvió los 13 millones de dólares de ingresos de su contrato de consultoría a un puñado de empresas del área de Miami
En pocos meses, el negocio de consultoría de Rivera cobró 20 millones de dólares de la filial estadounidense de Venezuela, PDV USA, pero su contrato con el ex político terminó abruptamente cuando fue acusado de hacer poco trabajo, según una demanda. Documentos judiciales recién presentados revelan que Rivera desvió más de la mitad de sus ingresos de PDV USA -13 millones de dólares- a tres subcontratistas en Miami que supuestamente prestaban «servicios de consultoría estratégica internacional» para la firma venezolana.
Uno de los subcontratistas de Rivera que recibió millones de su acuerdo con Venezuela es un promotor inmobiliario que fue condenado en uno de los mayores casos de narcotráfico del sur de Florida, según han sabido el Miami Herald y el Nuevo Herald gracias a los registros judiciales. No está claro en los registros si el promotor inmobiliario de Miami Hugo Perera y los otros receptores de los pagos de Rivera alguna vez hicieron algún trabajo como parte del contrato de su firma consultora con PDV USA.
La filial estadounidense de Venezuela sólo tuvo conocimiento del desvío de pagos de Rivera después de que demandara a su empresa, Interamerican Consulting, en 2020; ahora está luchando con Rivera y los abogados de su empresa para obtener pruebas clave del ex político. PDV USA, con sede en Nueva York, busca recuperar los 20 millones de dólares en pagos de la empresa de Rivera en una demanda por incumplimiento de contrato derivada de su acuerdo original de 50 millones de dólares firmado en 2017. La empresa de Rivera ha presentado una contrademanda que busca el pago completo del contrato.
Rivera, que nunca se registró como agente extranjero ante el gobierno de Estados Unidos para hacer trabajos de consultoría para la firma venezolana, ha estado bajo escrutinio en una investigación criminal paralela por parte de los fiscales federales en Miami, según varias fuentes familiarizadas con la investigación. Pero nadie, incluido Rivera, ha sido acusado en relación con su contrato con PDV USA.
Los expedientes judiciales del caso PDV USA, presentados en un tribunal federal de Nueva York, muestran que Rivera desvió los 13 millones de dólares de ingresos de su contrato de consultoría a un puñado de empresas del área de Miami.
Fuente: Miami Herald