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Según informa el diario «O Globo», Vieira Lima dejó de ser ministro jefe de la Secretaría de Gobierno este viernes (25.11.2016) por decisión propia, tras entregar su carta de renuncia a Temer.
En la misiva, Vieira Lima señala que «es hora de salir» y pide disculpas «a los que están siendo alcanzados» por el caso. «Pero Brasil es más grande que todo esto», añade.
Vieira Lima, uno de los principales asesores y amigo personal de Temer desde hace mucho tiempo, fue acusado por el ex ministro de Cultura Marcelo Calero de presionarlo para que cambiara una decisión técnica ya tomada.
El 19 de noviembre, un día después de su renuncia, Calero relató al diario «Folha de Sao Paulo» que su salida se había debido a las presiones sufridas por Vieira Lima para modificar una resolución que no permitía la construcción de un edificio en un área protegida de Salvador de Bahía, en el noreste del país.
De acuerdo al relato de Calero, Vieira Lima le había confesado que él mismo tenía comprado ya un apartamento en ese emprendimiento y que por eso necesitaba que el Instituto del Patrimonio Histórico y Artístico Nacional (Iphan), dependiente de Cultura, revisara la resolución de impedir la construcción en ese lugar.
El pasado viernes, Calero amplió su testimonio ante la Policía Federal acusando de presiones indebidas incluso a Temer. Según dijo, en una reunión del 17 de noviembre, el presidente lo había inducido a encontrar una solución al asunto, ya que Vieira Lima estaba «bastante irritado».
Los rumores de que Calero grabó de forma clandestina la conversación que sostuvo ese día con Temer son cada vez mayores. El fiscal general de Brasil, Rodrigo Janot, es quien debe decidir ahora si pedir autorización al Supremo Tribunal de Justicia del país sudamericano para investigar a Vieira Lima por las denuncias recibidas.
Vieira Lima es el sexto ministro que deja su cargo desde que Temer asumió oficialmente la presidencia de Brasil el 31 de agosto de este año.
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