[ad_1]
La viveza siempre está presente y no perdona ni siquiera a la iglesia. En el estado Táchira un sujeto se hacía pasar por “sacerdote” y pedía dinero a otros representantes del clero para su congregación. Se auto llamaba el padre Héctor y fue capturado con las manos en la masa por la policía regional.
[ad_2]
Fuente