Hallan otro flotador de helicóptero desaparecido en Panamá con tripulación venezolana

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Este sábado fue hallado el segundo flotador del helicóptero Robinson 44, matrícula HP-1762, desaparecido el pasado 01 de noviembre en aguas panameñas, luego de despegar del barco atunero Don Ramón con los tripulantes venezolanos Joel José Rivas Bertorelli (piloto) y Luis Paravabidez (mecánico).

La información, reportada por Globovisión, fue confirmada por el asesor de víctimas de accidentes aéreos, William Dugarte, quien junto a un grupo de familiares de los desaparecidos se encuentra acompañando el operativo de búsqueda que realizan las autoridades de Panamá.

“Ayer fueron visualizados otros posibles restos de la aeronave, que al ser recuperados del mar y trasladados a tierra se pudo confirmar que se trataba del segundo flotador del helicóptero desaparecido, con lo cual queda confirmado que el mismo impactó contra el mar”, anunció Dugarte.

El vocero de un grupo de familiares detalló, que de acuerdo a su experiencia en siniestros aéreos, sumada a los análisis realizados por los rescatistas panameños, “no hay mayores probabilidades de que existan sobrevivientes”.

“Las condiciones de ambos flotadores denotan que se trató de un impacto a gran velocidad contra el mar”, reveló.

Hipótesis del hecho

William Dugarte manifestó que tras encontrarse primero un flotador y luego el segundo, tiene suficientes indicios para sustentar la hipótesis de lo que pudo ocurrirle al HP-1762.

“Se presume que el helicóptero volaba bajo debido a que había muy mal tiempo en la zona al momento de su desaparición, y que una potente ráfaga de viento hizo que se perdiera el control y cayera de manera brusca al agua”, indicó.

Continuó diciendo, que “los tripulantes, cumpliendo con las regulaciones aeronáuticas, de seguro llevaban puestos los cinturones de seguridad, por lo que al impactar a alta velocidad contra el agua no se los habrían podido quitar pues además estarían aturdidos por el fuerte golpe”.

Enseguida el Robinson 44 se habría hundido en pocos segundos, sumergiéndose en una zona cuya profundidad supera los 2 mil metros, lo cual hace prácticamente imposible un eventual reflotamiento de la aeronave.

Ahora, agregó el asesor de víctimas de accidentes aéreos, la búsqueda pasará a una segunda fase, ya que pese al esfuerzo de hallar a los venezolanos vivos, el actual escenario se orienta a la ubicación de otros posibles restos del aparato que pudieron desprenderse e ir saliendo a flote con el pasar de los días.

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