Días después de que Guardian Media destacara la difícil situación de una familia que involucra a dos parejas venezolanas y 12 niños que viven en un contenedor abandonado en Penal, la familia ha sido reubicada.
La coordinadora del Grupo de Apoyo al Migrante de La Romaine, Angie Ramnarine, dijo que algunas benefactoras venezolanas se llevaron a la familia a vivir en una casa de dos habitaciones en la región de Agua Santa en Arima.
“Un hombre (cuyo nombre se retiene) les ha ofrecido una vivienda sin terminar, que está equipada con luces y agua”, dijo Ramnarine.
Dijo que la familia aún no ha encontrado trabajo.
“Han recibido alimentos, artículos de cuidado personal y ropa para bebés, así como pañales que se han llevado”, dijo Ramnarine.
Señaló que los miembros de la Iglesia Santa Rosa RC visitarán a la familia para asegurarse de que estén bien.
Como millones de otros venezolanos, la familia salió de Venezuela en busca de una vida mejor.
Las hermanas Anna, de 28 años y Auris Marcano, de 29, sus esposos y 12 de sus hermanos e hijos habían estado viviendo dentro de un contenedor abandonado de 20 pies desde que las echaron de su departamento alquilado en San Fernando.
Hace dos semanas, Auris dio a luz a un bebé en el suelo del contenedor abandonado que gotea durante la lluvia.
Marcano llegó a Trinidad hace dos años. Anna dejó atrás a dos de sus hijos de 11 y 12 años.
Ella dijo que desde que perdieron sus trabajos, no ha podido proporcionar comida ni dinero a los niños que dejó atrás.
Fuente: cnc3.com