¡Otra tragedia migrante en México! ¿Cuántas más necesitamos para darnos cuenta de la negligencia y falta de humanidad del Gobierno? ¿Cómo es posible que estas personas hayan muerto en un centro de migración bajo la custodia del Instituto Nacional de Migración? ¡Es inaceptable! Y ahora resulta que el incendio fue provocado por los propios migrantes, ¡vaya excusa! ¿Dónde están las pruebas contundentes de que fue así? Y si fuera cierto, ¿cómo es posible que el personal migratorio no haya actuado con rapidez para evitar esta tragedia? ¡Son unos incompetentes! Y para colmo, las personas heridas están en estado grave-delicado, ¿cuántas de ellas morirán también por la falta de atención médica adecuada? ¡Es una vergüenza para México y para el mundo entero! Y mientras tanto, las autoridades se lavan las manos y no asumen su responsabilidad. ¿Qué más necesitamos para exigir un cambio real y humano en la política migratoria de este país? ¡Basta ya de tanta indiferencia e inhumanidad!
La tragedia migrante en Ciudad Juárez, Chihuahua, ha conmocionado al país y al mundo entero. El incendio ocurrido en un inmueble del Instituto Nacional de Migración (INM) el 27 de marzo de 2023, dejó un saldo de 39 personas fallecidas y otras 29 heridas, muchas de ellas en estado grave.
Según los informes iniciales, el incendio fue provocado por una protesta de migrantes centroamericanos que se encontraban recluidos en el centro migrante del INM, esperando ser deportados a sus países de origen. Sin embargo, diversos medios han señalado que la negligencia del personal del INM también pudo haber sido un factor determinante en la tragedia.
De acuerdo con testimonios de sobrevivientes y autoridades anónimas, el área donde se encontraban los migrantes se encontraba cerrada y el guardia a cargo se negó a abrir la puerta cuando le solicitaron hacerlo. Además, el personal del centro migrante no habría actuado con rapidez al momento de detectar el fuego, lo que habría impedido la evacuación de los migrantes y la salvación de sus vidas.
Las víctimas mortales, en su mayoría oriundas de Venezuela, fallecieron por asfixia e intoxicación a causa del denso humo que se propagó por el área de confinamiento en la que se encontraban. Las personas heridas fueron trasladadas a cuatro diferentes nosocomios en estado delicado-grave, y aún no se ha confirmado el deceso de algún hospitalizado.
La tragedia ha generado un gran dolor y consternación en todo el país, así como un intenso debate sobre la política migratoria del gobierno mexicano y la situación de los migrantes en el país. La gobernadora de Chihuahua, Maru Campos, y el alcalde del municipio aún no se han pronunciado al respecto, mientras que algunos miembros de la oposición y críticos de la administración han señalado la deficiente política migratoria del gobierno como una de las causas de la tragedia.
La tragedia en el centro migratorio del INM ha generado indignación y condena a nivel nacional e internacional. Diversas organizaciones de derechos humanos han señalado la responsabilidad del Estado en la tragedia, así como la falta de protección a los migrantes en el país.
El Instituto Nacional de Migración ha sido criticado por su manejo de la situación, así como por la falta de medidas de seguridad en el centro migratorio. También se ha cuestionado la política migratoria del gobierno de López Obrador, que ha sido criticada por su falta de protección a los migrantes y su colaboración con el gobierno de Estados Unidos en la contención de la migración hacia el norte.
Ante la tragedia, el presidente López Obrador ha anunciado que se llevará a cabo una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos y determinar las responsabilidades correspondientes. Sin embargo, la falta de transparencia y la opacidad en la investigación han generado escepticismo y desconfianza entre la sociedad.
La tragedia del centro migratorio del INM es un reflejo de la situación de vulnerabilidad y desprotección en la que se encuentran miles de migrantes en México. Es necesario que el gobierno y la sociedad en su conjunto asuman la responsabilidad de garantizar la protección y el respeto a los derechos humanos de todos los migrantes que transitan por el país.