La gran artífice de que la economía rusa haya aguantado el primer embate de las sanciones impuestas por la guerra de Ucrania; la presidenta del Banco Central de Rusia, Elvira Nabiúllina; advirtió este lunes ante los diputados de la Duma Estatal que las reservas del país se acaban y la verdadera crisis llegará entre el segundo y el tercer trimestre de este año. Su aviso, tajante a la vez que medido, palabra a palabra, en una rara opinión crítica de un alto cargo en los últimos meses; fue rechazado por el propio Vladímir Putin pocas horas después. “Rusia ha resistido una presión sin precedentes. La situación se está estabilizando”; afirmó el mandatario durante una conferencia sobre la situación económica del país.
Nabiúllina subrayó que la situación está lejos de normalizarse. “El periodo en el que la economía ha podido vivir de las reservas se ha terminado. Ya en el segundo trimestre o principios del tercero entraremos en una etapa de transformación estructural”; afirmó la economista, cuyo mandato al frente del organismo monetario expiraba este año y será prorrogado cinco años más por decisión de Putin.
En su opinión, las sanciones “afectaron antes a los mercados financieros, pero a partir de ahora empezarán a perjudicar cada vez más a los sectores de la economía real”. La gobernadora del Banco Central de Rusia puntualizó que el problema no está en el sistema financiero, sino en la escasez de suministros que recibirán en un futuro próximo las fábricas y empresas. “Los principales problemas no estarán tan asociados a las sanciones a las entidades financieras, como a las restricciones a las importaciones y, en el futuro, a las exportaciones de productos rusos”, añadió.
Fuente: El País