Otro conflicto se está gestando en el Caribe

0
345

La guerra de Rusia en Ucrania agita los sueños de conquista de Venezuela en la rica Guyana.
Si la invasión rusa de Ucrania nos ha enseñado algo; es que los líderes autoritarios se consideran por encima de la ley, sin que las declaraciones de soberanía, las protecciones de los derechos humanos y las instituciones internacionales establecidas después de la Segunda Guerra Mundial puedan impedir futuros conflictos. Para el presidente ruso Vladimir Putin y los de su calaña; las reglas del orden internacional están hechas para romperse. Y sus últimas hazañas demuestran que, sin una disuasión creíble, la conquista territorial está sobre la mesa.

Un barril de pólvora mucho más cercano a Estados Unidos podría ser una de las próximas pruebas del mundo: la frontera entre Guyana y Venezuela; donde los dos países se han visto envueltos en una amarga lucha por una región disputada conocida como el Essequibo.

Los orígenes de la disputa se remontan a 1831, el año después de que Venezuela se convirtiera en un estado soberano. Por aquel entonces, el Imperio Británico estaba consolidando sus territorios a lo largo de la costa norte de Sudamérica; que había comprado a los Países Bajos en 1814. La zona al oeste del río Essequibo estaba entre ellos y pasó a formar parte de la Guayana Británica. España ya había reclamado algunas de estas tierras; pero la preocupación de Madrid por los movimientos independentistas en toda Latinoamérica impidió que las autoridades españolas impugnaran la ocupación británica de la región. Sin embargo, tras la independencia de Venezuela y el descubrimiento de oro en el Esequibo en la década de 1850; las autoridades venezolanas hicieron valer su reclamación heredada, llegando a romper las relaciones diplomáticas con el Reino Unido en 1887 hasta que los países pudieran llegar a un compromiso sobre la frontera.

En 1897, tanto Venezuela como la Guayana Británica cedieron la jurisdicción de la disputa del Esequibo a un tribunal internacional en París, compuesto por juristas de Estados Unidos, Reino Unido y Rusia. Un fallo de 1899 permitió a Venezuela conservar la cuenca del río Orinoco, mientras que a la Guayana Británica se le concedió más del 90% de las tierras densamente boscosas entre los ríos Orinoco y Essequibo. En la actualidad, esa zona representa unos dos tercios del territorio nacional de Guyana.

Fuente: Foreign Policy Magazine