El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo el miércoles que su gobierno mantiene contacto con los tenedores de bonos del país y que está dispuesto a cumplir con las obligaciones de pago que han quedado sin atender desde finales de 2017.
Los asesores de Maduro hablaron con inversionistas y tenedores de bonos de Europa y Estados Unidos sobre el potencial económico de su país durante una llamada en enero.
«Tenemos un diálogo con (los bonistas) y les hemos hecho una oferta muy poderosa para que Venezuela honre sus compromisos». Dijo Maduro durante un evento con banqueros transmitido por la televisión estatal. «Pero el gobierno de Estados Unidos lo está impidiendo».
Maduro no dio detalles sobre la propuesta pero dijo que los tenedores de bonos son los perjudicados por las sanciones de Estados Unidos.
Venezuela suspendió los pagos a los tenedores de bonos en noviembre de 2017 y propuso renegociar 60.000 millones de dólares en deuda. Pero las sanciones de Washington, que bloquean a las empresas y personas estadounidenses de hacer negocios con Venezuela ha obstaculizado cualquier conversación. En octubre de 2020 se hizo otro intento de renegociación sin éxito.
Maduro también anunció medidas destinadas a aumentar la flexibilidad del crédito. Los bancos locales pueden ahora destinar el 10% de los depósitos en moneda extranjera a créditos para sectores productivos.
Esos créditos, equivalentes a unos 74 millones de dólares, serán autorizados en dinero local y estarán atados al tipo de cambio, dijo la vicepresidenta Delcy Rodríguez en el evento.
El Banco Central revisará el encaje bancario y permitirá a las instituciones financieras mantener sólo el 73% de los depósitos, en lugar del 85% anterior, dijo Rodríguez.
«La anunciada reducción de reservas es absolutamente insuficiente para liberar liquidez y aumentar el crédito», dijo el economista José Guerra en Twitter.
El gobierno intenta reducir el gasto en moneda local y limitar el crédito en un intento por reducir la cantidad de bolívares en circulación, ayudar a la estabilidad del tipo de cambio y combatir la inflación, que alcanzó 686,4% el año pasado.
Fuente: Reuters