Sin que lo supieran los pasajeros que embarcaron en diciembre en un vuelo comercial con destino a la República Dominicana, Ricardo Villasmil, de 22 años, iba a ser deportado.
Utilizó su teléfono para grabar discretamente un vídeo de nueve segundos para avisar a su madre de que iba a ser expulsado de Estados Unidos, a través de Santo Domingo, la capital de la República Dominicana.
Había buscado refugio en Estados Unidos del régimen de Maduro en Venezuela, donde su padre fue asesinado en 2008.
En cambio, aunque Estados Unidos no reconoce al gobierno del presidente venezolano Nicolás Maduro, el gobierno de Biden pudo devolverlo a Venezuela utilizando un tercer país, la República Dominicana.
La administración del presidente Joe Biden ha estado deportando a los venezolanos por medio de un tercer país a pesar de condenar al ex presidente Donald Trump por hacer lo mismo.
En medio de la reñida carrera presidencial de 2020, Biden arremetió contra Trump por utilizar lo que, según Biden, eran «deportaciones furtivas» a través de terceros países para enviar a los venezolanos «de vuelta al régimen opresor de Maduro.»
Trump había utilizado a Trinidad y Tobago, también en el Caribe, para deportar a venezolanos, una práctica revelada por Noticias Telemundo Investiga en marzo de 2020. En ese año fiscal, ICE deportó a 193 venezolanos a través de terceros países.
Desde el 1 de octubre de 2020 hasta el 31 de septiembre de 2021 -ocho meses de los cuales cayeron bajo el gobierno de Biden- el ICE deportó a 176 venezolanos, mostraron los datos de la agencia obtenidos por Noticias Telemundo Investiga.
En el año fiscal 2021, hubo más de 50.000 detenciones de venezolanos en la frontera, 10 veces más que en el año anterior.
Entrevistas con varios deportados y sus familias ilustraron que la administración sigue realizando deportaciones de venezolanos a terceros países.
El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos no respondió a las solicitudes de comentarios. Un portavoz del ICE, parte del DHS, dijo que en este caso, «el ICE proporciona notificaciones de expulsión a la República Dominicana como país de tránsito».
El proceso se utiliza a menudo cuando no hay conexiones aéreas directas con los países de los deportados – en este caso, Venezuela.
El ICE dijo a Noticias Telemundo que no tiene contratos con aerolíneas comerciales.
Advirtió entonces en un comunicado que las deportaciones a través de terceros países eran «una posible violación de las leyes y políticas de Estados Unidos.»
El senador Menéndez dijo en un comunicado el martes que los recientes informes de la administración de expulsar a los venezolanos a través de terceros países «es extremadamente preocupante» y puede conducir a «duras consecuencias» para los venezolanos que son enviados de vuelta.
Menéndez instó a la administración a poner fin a las expulsiones aceleradas de solicitantes de asilo relacionadas con la pandemia y a restablecer la tramitación regular de las solicitudes de asilo.
Las autoridades dominicanas no respondieron a una solicitud de comentarios de Noticias Telemundo Investiga.
El año pasado, el gobierno de Biden anunció que permitiría a miles de venezolanos en Estados Unidos la posibilidad de solicitar el Estatus de Protección Temporal, o TPS, que proporciona protección contra la deportación.
Para poder optar al TPS, los solicitantes deben demostrar una residencia continua en Estados Unidos a partir del 8 de marzo de 2021.
Una condena a la tortura o a la muerte, o a ambas
Algunas de las personas que están siendo deportadas son venezolanos que llegaron a Estados Unidos hace varios meses y pidieron protección en la frontera estadounidense al gobierno de Maduro.
En su último informe sobre derechos humanos, el gobierno estadounidense definió a Venezuela como «un régimen ilegítimo y autoritario» cuyos líderes y fuerzas de seguridad cometen «crímenes contra la humanidad.»
Tras medio año detenido por el ICE en Luisiana, Villasmil fue trasladado al aeropuerto internacional Newark Liberty, en Newark (Nueva Jersey), donde intentó luchar contra su deportación.
«Me negué a bajar del camión. Dije que ir a mi país era el fin para mí», dijo Villasmil en una videollamada desde Venezuela. «No les interesó. Lo único que hicieron fue amenazarme con que me mantendrían incomunicado más tiempo si me negaba a subir al avión».
Villasmil dijo que le quitaron las esposas antes de entrar en la terminal, y le advirtieron que no creara ningún tipo de jaleo en el aeropuerto. Otros deportados dijeron a Noticias Telemundo que recibieron las mismas instrucciones.
Su familia ha dicho que debido a razones políticas han enfrentado años de arrestos, cambios de dirección, secuestros y una amenaza de muerte que desencadenó su salida del país. Siete miembros de la familia llegaron a la frontera de Estados Unidos para solicitar asilo en junio.
Las autoridades estadounidenses «saben que la sentencia para estos venezolanos va a ser la tortura o la muerte, o ambas», dijo el abogado de inmigración Elio Vázquez.
Fuente: Yahoo.com