Antonio Giménez es director de orquesta venezolano y busca fusionar las características del vallenato con la música académica para convertirla en un género de reconocimiento global, reseña Consejo de Redacción en un reportaje publicado en su página web.
La nota de la organización colombiana de periodistas señala que el músico venezolano de 49 años, oriundo de Barquisimeto, estado Lara, quedó fascinado por el ritmo del vallenato de Diómedes Díaz que escuchaba cuando iba en un carro de camino a la Universidad de La Guajira en Riohacha, Colombia, en donde se convirtió en profesor e investigador de la Licenciatura en Música.
A los 10 años comenzó sus estudios de música clásica de manera privada y a los 17 ingresó a la Licenciatura en Música en el Instituto Universitario de Estudios Musicales en Caracas, hoy conocido como la Universidad Nacional Experimental de las Artes (Unearte). En 1997 Giménez fue becado para ir estudiar a Francia, donde obtuvo un diploma en Composición de Música para cine en la Escuela Normal de Música de París.
Al regresar a Venezuela dirigió distintas orquestas del Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela y se destacó como profesor de música. Entre sus alumnos se encuentra el reconocido director de orquestas Gustavo Dudamel, entonces primer violín de laOrquesta Sinfónica Juvenil de Lara.
De la música clásica al vallenato
Giménez formó parte de los 1.729 migrantes venezolanos en Colombia – según datos de Migración Colombia en diciembre de 2020 – tras haber pasado por momentos económicos difíciles en 2017 debido a la inflación en Venezuela.
“Me pagaron mi sueldo, fui a hacer mercado y todo se me fue en un litro de leche, un cartón de huevos y unas verduras. No había más plata para todo el mes. Los meses siguientes recurrí a la venta de los equipos de mi estudio de grabación y algunas joyas para poder comer y pagar los gastos de mi hijo, y eso que mi esposa también trabajaba”, contó.
El músico venezolano decidió participar en el concurso de la Universidad de La Guajira para optar por un puesto como profesor de música con la intención de llevar sus conocimientos y experiencias reflejadas en un doctorado a un país que le permitiera un mejor sustento. “Cuando me notificaron que había sido seleccionado no dudé en viajar a Colombia”, dijo.
Roger Bermúdez, psicólogo y músico docente, es quien comenzó a convencer a cada profesor de que “están frente a una oportunidad histórica para hacer del vallenato una música universal”, por lo que le encargó al profesor venezolano investigar sobre la creatividad musical con los elementos vallenatos para evolucionarlo en diferentes direcciones sin dejar de conservar su esencia.
El piano solista en el vallenato
Giménez señala a Consejo de Redacción que se encuentra trabando en la Pianística Vallenata, una técnica que le permite al estudiante aprender a tocar piano usando la música vallenatacomo un instrumento pedagógico. «Cada arreglo está pensado con diversos criterios de dificultad técnica desde muy sencillos hasta muy complejos(….) de igual manera está contemplada la Guitarrística Vallenata, y así se irá desglosando para todos los instrumentos”.
“En el conjunto vallenato el piano es de reciente inclusión y principalmente se usa como un instrumento acompañante. Al introducir la modalidad del piano solista en el vallenato, se lleva el género a una dimensión más universal, se evoluciona su lenguaje y, por ende, su técnica de ejecución se hace más compleja, pero conservando la esencia de la música que le dio su origen”, explica Giménez.
Avances en el vallenato
La pandemia por el COVID-19 no ha detenido al profesor venezolano ni a sus 50 alumnos, que ya están por graduarse. Giménez ha grabado todas sus clases en video, con ejemplos sonoros para adecuarse a la creación de aulas virtuales, además de las clases sincrónicas y la creación de un canal de YouTube, donde los estudiantes pueden encontrar contenidos asociados a su proceso de formación musical.
El músico venezolano ha elaborado una biblioteca de sonidos y patrones del género para usar creativamente en arreglos y composiciones originales, que comparte con sus alumnos y compañeros de trabajo. La biblioteca le permite sumar a la lista de reproducción de música universal, piezas de Luis Enrique Martínez, Alejo Durán, Juancho Polo Valencia, Leandro Díaz, Diomedes Díaz, Silvestre Dangond y distintos trabajos de vallenato acústico.
En 2019 Antonio Giménez fue seleccionado como jurado del Festival Francisco el Hombre, un espacio cultural para la formación de intérpretes vallenatos. Actualmente el profesor sueña con la creación de un estudio de postgrado en Vallenatología.
“La presencia de los músicos venezolanos en la Licenciatura en Música, más que favorable, la considero indispensable porque es una oportunidad para el territorio tener profesores de un país que tiene mucho más avance en el campo de la música que el nuestro, muy a pesar de su crisis (…) Los músicos venezolanos tienen el bagaje de la música universal y además entienden perfectamente la cultura caribeña, eso ha sido ganancia para nosotros”, asegura Roger Bermúdez.
Fuente: Revista Venezolana