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- Marbella acaba de cancelar la adjudicación del proyecto al jeque del Málaga
- El gigante asiático sale del proceso de ampliación de La Bajadilla
- Tras dejar la operación, analiza nuevas operaciones en la Costa del Sol
Ilustración del proyecto de ampliación del Puerto La Bajadilla, en Marbella. eE.
El gigante chino Wanda ha vuelto a fracasar en su aspiración por cerrar una importante operación en España. El grupo, que era uno de los interesados en quedarse con el proyecto de ampliación del puerto de La Bajadilla, en Marbella, se encuentra ya fuera del proceso, según han explicado a este periódico fuentes del sector. Así, este desarrollo se suma a su lista de fallidos en el país, encabezada por el madrileño Edificio España, al que le sigue la Operación Campamento y el Marbella Club.
El conglomerado asiático, especialista en el sector del ocio, quería darle un nuevo enfoque al desarrollo, instalando un casino o en su defecto, salas de juego, en los nuevos espacios del puerto. Este detalle suponía un impedimento en los objetivos de Wanda, ya que para ello necesitaba modificar el proyecto que fue aprobado en su momento por el Ayuntamiento marbellí y obtener nuevas licencias especiales, que debían ser aprobadas por la Junta de Andalucía.
Esto podría retrasar aún más la ejecución de un proyecto de 400 millones, que lleva paralizado desde 2011, cuando fue adjudicado a la sociedad NAS Marbella, empresa participada mayoritariamente por el jeque Al-Thani (propietario del Málaga CF). Tras cinco años sin avances en el proyecto, el Ayuntamiento de Marbella ha logrado, en un largo proceso, que se retire la adjudicación. Así, la Consejería de Fomento y Vivienda, a través de la Agencia Pública de Puertos de Andalucía (APPA), ha resuelto el contrato suscrito con NAS Marbella por incumplimiento grave de las obligaciones esenciales, ya que no se habían iniciado las obras, ni se había hecho efectivo el pago del canon concesional correspondiente a parte de 2015 y 2016, que supera los 1,4 millones de euros.
Este logro, puede volverse en contra del proyecto si el jeque decide a lo largo de los próximos tres meses tomar acciones legales y presentar un Contencioso-Administrativo o un recurso de reposición, lo que eternizaría el proceso en los tribunales. En caso de que Nas Marbella decida asumir la resolución del contrato, existen dos alternativas para sacar adelante el desarrollo, que implican caminos muy distintos.
Por un lado, y en el peor de los casos, deberá iniciarse un nuevo proceso que arranque desde cero para llevar a cabo un nuevo concurso. Esto supondría una espera de varios años hasta que pueda iniciarse el desarrollo del proyecto.
La otra alternativa, y por la que el Ayuntamiento de Marbella trabaja estos días contrarreloj, es encontrar a un inversor dispuesto a asumir el proyecto tal y como está aprobado actualmente -contemplando pequeños cambios- y que sustituya de forma casi inmediata a la sociedad Nas Marbella.
El Consistorio considera que ésta es la mejor alternativa para dar salida al proyecto de forma más ágil y, por ello, lleva meses en negociaciones con distintos grupos inversores internacionales. En este sentido, el medio local Sur, asegura que el grupo Damac, una de las mayores inmobiliarias del Golfo Pérsico, es el más avanzado en las conversaciones con el Ayuntamiento, que también ha recibido el interés del grupo de origen mexicano Melbros, establecido en Miami.
Todos ellos estaban en la lista de interesados junto a Wanda, que según han explicado fuentes del sector a elEconomista, sigue analizando posibles operaciones en España. De hecho, este podría haber sido otro de los motivos que han llevado al grupo chino a salir del proyecto de La Bajadilla. Así, aseguran que está interesado en proyectos hoteleros en la Costa del Sol.
Características del proyecto
El Consistorio marbellí trabaja para que el proyecto de ampliación del puerto se relance, pues supondrá un importante impulso para el municipio desde el punto de vista económico y también laboral, ya que se estima que su desarrollo supondrá la creación de 3.000 empleos.
«En la Costa del Sol, actualmente hay un déficit importante de amarres, y la situación se agravará si en menos de tres años no se dota esta zona con al menos otros 650 puntos de atraque», explica Patricio Palomar, director de Alternative Investmente de CBRE. El proyecto de La Bajadilla contribuiría a salvar esta situación, ya que contempla un importante muelle especial para el atraque de buques de cruceros turísticos, «convirtiéndose en la principal característica de su escala portuaria». En total tiene una capacidad para 1.220 embarcaciones deportivas con esloras comprendidas entre 6 y 125 metros, y para cruceros de 170 metros de eslora.
Además, según aparece en la web del Estudio de arquitectura Seguí, que fue quien diseñó el proyecto para Al-Thani, la ampliación contempla un centro comercial de 23.800 metros cuadrados, así como otros 20.800 metros cuadrados de suelo para uso comercial en los muelles. Además, incluye un hotel de cinco estrellas especial, de 19.800 metros cuadrados con unas 190 habitaciones, que iba a ser gestionado por BlueBay.
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