[ad_1]
Publicado en: Actualidad, Internacionales
Dos presuntos guerrilleros de las FARC murieron en “combates” con el Ejército de Colombia, en medio del cese al fuego bilateral vigente y cuatro días después del nuevo acuerdo de paz que aún debe ser refrendado, informaron este miércoles fuentes oficiales.
AFP
“Hubo combates en el sur de Bolívar (norte), han muerto unos guerrilleros que se dice pertenecen a las FARC”, dijo el jefe negociador de paz del gobierno, Humberto de la Calle, en una entrevista con Caracol Televisión.
El Ejército informó en un comunicado que otro supuesto insurgente se entregó y manifestó que él y los dos fallecidos pertenecen al Frente 37 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas).
Por otra parte, las fuerzas militares señalaron que pobladores de la zona dijeron que los guerrilleros eran integrantes del Ejército de Liberación Nacional (ELN, guevarista), la segunda organización insurgente del país, dedicados al cobro de extorsiones a ganaderos, mineros, transportadores y comerciantes.
Por estas denuncias, afirmaron, las autoridades desarrollaron una operación contra los presuntos rebeldes, en la que además “se incautaron de tres armas cortas, munición y proveedores, una granada de fragmentación, un radio de comunicaciones, material de intendencia y documentación”.
Los combates tuvieron lugar después de la firma el sábado de un nuevo pacto de paz entre el gobierno de Juan Manuel Santos y las FARC en Cuba, sede de las negociaciones iniciadas en 2012 para poner fin a más de medio siglo de conflicto armado.
El renegociado acuerdo, que llevará al desarme de la guerrilla y su transformación a organización política legal, incluye reclamos de la oposición tras el rechazo al anterior en un plebiscito el 2 de octubre y aún debe ser refrendado en un mecanismo por definir, para luego ser implementado.
Las FARC, principal y más antiguo grupo rebelde del país con 5.765 combatientes según sus estimaciones, no se han pronunciado sobre el tema por el momento.
– “Carácter delincuencial” –
“Lo que suscribe el Ministerio de Defensa es que allí había una operación de carácter delincuencial”, afirmó De la Calle, y agregó que le informaron que los insurgentes estaban “bastante alejados del sitio de preagrupamiento”, donde se concentra la guerrilla a la espera de la implementación del acuerdo de paz. Según el Ejército, la distancia era de 68 km.
El primer acuerdo sellado con las FARC estipulaba que los guerrilleros debían concentrarse en 27 zonas, con verificación tripartita, incluyendo a las Naciones Unidas, del cumplimiento del desarme, cese al fuego y hostilidades.
Pero tras el revés electoral, se acordó que los rebeldes se preagruparan en 26 lugares, también con acompañamiento internacional, a la espera del renegociado pacto.
De la Calle sostuvo el jefe negociador de paz de las FARC, Iván Márquez, le explicó que los rebeldes iban rumbo al lugar de concentración. “Hay unas discrepancias de narrativas”, puntualizó.
“No podemos demorarnos, sí hay un nuevo acuerdo, sí es una oportunidad de terminar el conflicto en Colombia, no podemos desaprovechar esa oportunidad”, aseveró, tras reiterar “lo frágil” que es el cese al fuego entre las partes vigente desde el 29 de agosto.
– “Enorme riesgo” –
Al anunciar el nuevo acuerdo alcanzado con las FARC, Santos también había destacado el sábado cuán “indispensable” era “lograr este acuerdo renovado muy rápido” ante la vulnerabilidad del alto al fuego.
“El cese al fuego es frágil. La incertidumbre genera temores y aumenta los riesgos de echar este inmenso esfuerzo al traste”, indicó en una alocución televisada.
En el mismo sentido se refirió el Alto Comisionado para la Paz, Sergio Jaramillo, para quien el “incidente” de este miércoles muestra una situación “seria” e “inestable” en el terreno, donde miles de guerrilleros están a la espera de “lo que va a ocurrir” con el proceso.
“La principal lección de esto es pasemos ya a la implementación”, afirmó a periodistas.
Jorge Restrepo, director del centro de análisis del conflicto Cerac, señaló que es la primera violación documentada del alto al fuego bilateral en 80 días.
“Esto demuestra que sólo el desarme puede conducir a parar por completo las actividades criminales de las FARC”, dijo a la AFP.
Según el experto, los opositores al primer acuerdo de paz con esta guerrilla deben tener en cuenta este “enorme riesgo” de que se reinicie el conflicto.
Colombia registra más de 260.000 muertos en medio siglo de violencia fratricida, que ha involucrado a guerrillas, paramilitares y agentes de la fuerza pública.
raa/fj
[ad_2]
Fuente